lunes, 24 de febrero de 2014

Coruña 21, mi artículo en el dxtcampeón

Hola a todos!

Esta semana he decidido rendir mi homenaje a los casi 2000 corredores, de ellos casi 1700 populares, que participaron este fin de semana en Coruña21, una prueba que he tenido la suerte de poder vivir desde dentro.

Feliz lunes!

Coruña21

Casi 2000 corredores llenaron de color las calles de Coruña este fin de semana. La sexta edición aunó Campeonato de España con un cartel de figuras de élite como Alessandra Aguilar, Ayad Lamdassem, Marta Esteban, Javier Guerra, Marisa Casanueva, Jesús Antonio Nuñez, el gallego Alejandro Fernández y las atletas Yolanda Gutiérrez y Paula Mayobre, entre otros, con más de 1600 corredores populares.

Atletas algunos de ellos que vivieron este domingo con especial ilusión, pues corrían su primera Media Marató. Otro, que ya repetían, deseando hacer marca, algunos con kilómetros en sus piernas tras entrenamientos a prueba de ciclogénesis, jóvenes y mayores, todos ellos con algo en común: su afán de superación. Esta vez no hubo que correr “contra viento y marea”, pero con cada kilómetro vencido que acercaba un poco más a meta a los atletas, subía el nivel de exigencia, pesaban las piernas y tocaba apretar los dientes.

Pero no había sufrimiento en los rostros de los valientes que cruzaban la meta de Coruña21 sino una explosión de alegría que contagiaba a todos los presentes, que con sus vítores llevaban en volandas a los corredores hasta la línea que marcaba el fin de su travesía, el stop en su crono. Antes ya habían disfrutado de un circuito rápido y prácticamente llano, que miraba de tú a tú al mar, bordeaba el paseo y terminaba por dictar sentencia en la misma recta en la que se había iniciado. Eran esos últimos metros los que más les costaban a los corredores, pero al final los más gratificantes, porque la fuerza que les quedaba brotaba de sus piernas, poniendo en marcha toda la maquinaria que les hacía cruzar la línea de meta.

Una meta donde se vivieron realmente emocionantes, además de con la llegada de los campeones Alessandra Aguilar y Ayad Lamdassem, con las lágrimas de  la atleta de Ares Paula Mayobre, novena en el Campeonato de España, y que no podía contener la emoción al parar su crono en Coruña21. Una carrera en la que todos fueron campeones, porque se superaron a si mismos, porque lucharon contra sus propios demonios y porque al final los vencieron, independientemente de su tiempo.

Coruña21 ha finalizado, pero nos quedan en la urbe los ecos del esfuerzo de los casi 2000 atletas que demostraron que en Coruña hay cultura runner y que el estilo de vida saludable es una de las señas de identidad de la ciudad herculina. ¡Feliz descanso campeones, os lo habéis ganado!

martes, 18 de febrero de 2014

Silencio, mi artículo para el Dxtcampeón

Hola a todos!

Os dejo mi artículo de esta semana en el Dxtcampeón sobre la falta de ayudas que sufren los deportistas. Me ha servido de inspiración la carta abierta de Pedro Nimo que pone voz a miles de historias como al suya de verdaderos currantes del deporte que no tienen más ayuda que su fuerza y ganas para conseguir sus gestas.

Feliz martes!

 Silencio

El deporte profesional vive tiempos difíciles. Lo hemos visto esa semana con el retiro temporal del triatleta santiagués Antonio Ruanova, que como flamante subcampeón de España deja la élite para poder ampliar sus estudios con vistas al futuro. Con el anuncio de la búsqueda de micromecenazgo del palista Carlos Rial y Álvaro Fernández Fiuza. No importa que el piragüista de Cangas fuese oro en Pekín, la crisis golpea con fuerza sobre el deporte y la tijera no vacila a la hora de cortar las ilusiones de los deportistas con los que antes otros se sacaban la foto y se les llenaba la boca apuntándose los tantos.

Sueños rotos los de Pedro Nimo, que renuncia a competir con España o Galicia en competiciones internacionales. El ganador de la última Clásica Behobia-San Sebastián ha dicho basta. El sonrojo que tendría que provocar su carta se quedará en un mínimo rubor, si es que vergüenza les queda. Malos tiempos para los deportistas, salvo si se trata de futbolistas de Primera División. No hay glamour detrás de los atletas de élite, sólo incontables horas de entrenamiento. No hay jets ni estancias en hoteles de cinco estrellas, ni sueldos o contratos millonarios. No hay horas de televisión en el desayuno, a la hora de comer ni en prime-time girando sobre banalidades. No hay portadas de periódicos cantando las gestas, que realmente sí que lo son, porque siempre habrá algo más importante que contar sobre el “deporte rey”.

Mientras se endiosan a deportistas, con más o menos motivo, se olvidan a los verdaderos “currantes” que día a día hacen encaje de bolillos para compaginar sus trabajos con el deporte.  Son los mismos que luego forman parte de las selecciones nacionales y los que arañan segundos en los informativos, eso siempre y cuando se traigan un metal colgado del cuello.

Detrás de esas preseas hay sesiones interminables de trabajo, sacrificios y entrenamientos compaginados con empleos, familia y trabas. Las que ponen la falta de ayudas, el hándicap como indicaba Pedro Nimo de tener que esperar a ganar para recibir algo, cuando todos sabemos que lo complicado son los inicios. No apoyar al deporte, dejarlo de lado y condenar a nuestros deportistas privándoles de la posibilidad de competir con un mínimo de dignidad, hacía eso nos dirigimos, si es que no hemos llegado ya a ese punto.  Algunos ya han alzado la voz, pero por ahora el silencio sigue siendo el más ensordecedor de los sonidos.

lunes, 10 de febrero de 2014

Xogos Escolares y artículo en el dxtcampeón, "Equipo"

Hola a todos!

Os dejo mi artículo de esta semana en el dxtcampeón, mi modesto homenaje a los equipos. Fácil escribir sobre lo que se siente al formar parte de uno, ya que es un privilegio que puedo disfrutar al formar parte del Baloncesto Cambre.


Equipo

“Los buenos equipos acaban por ser grandes equipos cuando sus integrantes confían los unos en los otros para renunciar al “yo” por el “nosotros”. (Phil Jackson, entrenador de baloncesto)

Las relaciones humanas implican convivencia. Concebir la vida como una travesía en el desierto debería ser una quimera. Nacimos para vivir en sociedad, para entendernos y para compenetrarnos. Y nada como el deporte como ensayo de ese modus vivendi. Formar parte de un equipo es mucho más que compartir una camiseta o un escudo. Supone más que coincidir en entrenamientos semanales o jugar partidos los fines de semana.

Implica para empezar poseer el sentimiento de pertenencia a un grupo. Al igual que nos sentimos arropados por una familia o nuestra pandilla de amigos, un conjunto nos acoge y nos da cobijo. Nos demuestra que las relaciones se cimentan también en la lucha que implican los encuentros y en la adversidad de las derrotas. Nos enseña que es en la colectividad donde está la fuerza, aunque cada jugador debe de intentar dar lo mejor de sí mismo.

No importa las veces que nos caigamos, siempre tendremos una mano tendida dispuesta a levantarnos. Fallaremos y erraremos mil veces pero habrá una voz que nos recordará que siempre hay una nueva oportunidad una vez el balón empieza a andar. Las críticas no nos derrumbarán porque siempre irán acompañadas de sabias enseñanzas y nos ayudarán a mejorar cada día.

El grito más fuerte será el del banquillo y las fuerzas no nos abandonarán sí creemos en lo que hacemos. Porque en el baloncesto como en la vida como decía Bozidar Maljkovic sólo hay dos posibilidades: sprint o stop. Aprenderemos que los trenes sólo pasan una vez y que lo que importa es el aquí y el ahora. Que el creer que puedes es ya tener medio triunfo ganado y que el resto nace del trabajo y del esfuerzo.

Que se aprende más de una derrota que de cien victorias, que hay que saber convivir con las dos situaciones y que cuando se pierde lo único que importa es saber levantarse para ganar. Alegría y tristeza se entremezclan, dolor y alivio, satisfacción y frustración. Ni en el mejor laboratorio se podría diseñar mejor prueba empírica de las enseñanzas que transmite el deporte de equipo para la vida.

Orgullosos deberían estar aquellos que pertenecen a uno, que sufren las derrotas y celebran los triunfos con sus compañeros, que pelean hasta el último aliento por un balón, que respetan al rival pero nunca lo temen, porque en el miedo está la fuerza del adversario. Jugadores de un equipo que, en definitiva, son capaces de ponerse en el lugar del otro y que terminan por renunciar a su individualismo para convertirse en uno solo, para ser un “nosotros”.

Y aquí os dejo el reportaje de la pasada semana de los Xogos Escolares, dedicado al waterpolo:


martes, 4 de febrero de 2014

Motivador, mi artículo del dxtcampeón sobre Luis Aragonés

Hola a todos!

Os dejo mi artículo de esta semana, de nuevo en páginas interiores y no en la contra, del dxtcampeón sobre la figura de Luis Aragonés.

Espero que os guste y hoy poneros a cubierto por la que pueda caer.

Motivador

Motivar: Disponer del ánimo de alguien para que proceda de determinado modo (Tercera acepción de la R.A.E)

Luis Aragonés podría ser la personificación de ese verbo. Aquel verano de 2008 tenía una selección llena de grandes jugadores pero, como había pasado con anteriores combinados nacionales, se cernía sobre ellos la sombra de la duda. ¿Serían capaces de romper la barrera psicológica de los cuartos? Una tradición que ya formaba parte del imaginario colectivo, un estigma al que parecían estar condenados todos los equipos que defendían la elástica roja y gualdo.

Los mimbres eran buenos, pero como buen artesano Aragonés supo darles forma, convenciendo a los jugadores desde el primer minuto que el destino estaba en sus manos si luchaban por él. “Todas las selecciones son muy buenas, pero nosotros estamos a la altura de los mejores. Yo ya tengo ganas como entrenador de ganar, de ganar una Copa de Europa y ustedes tienen categoría y calidad para conseguirla si hacen lo que deben de hacer”, aseguraba convencido en una de las múltiples charlas colectivas que ahora, con motivo de su fallecimiento, salen a la luz.

Pudimos ver otras muchas de él, en el campo. Sus métodos, a veces vistos como poco ortodoxos o incluso controvertidos, como la que tuvo con Reyes sobre Henry. Siempre con la verdad por delante, aunque doliese o aunque eso supusiese buscarse más de un enemigo, Aragonés no se tuvo que quitar nunca ninguna careta, porque simplemente nunca la tuvo. Fue él que dejó a Raúl fuera de la selección, provocando todo un cataclismo mediático. “Podéis pensar lo que queráis pero por suerte o por desgracia soy el seleccionador”, dijo entonces. En un mes se pasó de atribuirle el papel de villano que parecía representar por dejar fuera al 10 de España a convertirlo en héroe nacional al coronarse el 29 de junio de 2008 en el estadio de Ernst Happel de Viena.

Mucho antes, aunque a algunos nos falle a veces la memoria, de que Guardiola asombrase con su Barça gana-títulos y tuviésemos hasta en la sopa  el “tiki-taka”, el Sabio de Hortaleza inauguró un estilo de fútbol imitado después por otros equipos y que heredó Vicente del Bosque, continuando con él la estela de triunfos. También se acordó el salmantino de su antecesor el día que recogió el Príncipe de Asturias, rompiendo el protocolo e invitando a Aragonés a compartir ese galardón.

El técnico que se aprendía el nombre de los linieres, que decía que el “fútbol era cosa de listos” supo inspirar a aquella joven selección e impulsarla hacia lo más alto. Tenía esa capacidad, de la que no gozan todos los entrenadores, de motivar a sus pupilos. De hacer que sacasen lo mejor de sí mismos, de conseguir que jugasen incluso por encima de sus posibilidades. “Del subcampeón no se acuerda nadie, nosotros hemos venido aquí para ganar la Copa de Europa y vamos a ir con un pensamiento positivo a por ella. Hacemos fiesta si les ganamos, y como somos mejores les vamos a ganar”, fue la última premisa antes de la final. Una final que curiosamente supuso todo un principio. Gracias Míster.


Feliz martes!