miércoles, 21 de diciembre de 2016

Banquillo, mi artículo esta semana en Dxtcampeón

Hola a todos!

Con un poco de retraso, pero os dejo mi artículo de esta semana en Dxtcampeón.

Banquillo

En todos los equipos hay titulares y suplentes, jugadores más o menos habituales, aquellos que llevan los galones y los que tienen un papel más secundario. Pero todos los integrantes son importantes en una escuadra. Desde el primero al último. Es algo que los entrenadores tienen presentes así como todo el plantel. Algo fundamental para que un conjunto sea fuerte es que todos sus miembros se sientan así, independientemente de que unos tengan más incidencia en el juego que otro.

 Los que asumen la personalidad como titulares es probable que sufran durante el partido, pero donde se pasa muchas veces mal es en el banquillo. Y no porque los que lo ocupan no estén jugando en ese momento o quieran salir al campo y tengan que esperar. Se sufre en el banquillo no se puede hacer nada para cambiar lo que se ve. Ser espectador desde fuera es difícil, sobre todo en aquellos deportes en lo que los cambios son contados. Mientras, cuando las alternativas de entrar en la contienda son más libres, el banquillo es una estación de paso.

Pero en él también se disfruta y se anima a los compañeros. Es un factor motivante para los titulares, que sienten el aliento del resto de jugadores. Puede, además, ejercer presión sobre el rival. Muchas veces se ven cosas desde el banquillo que no se atisban en el campo y ayuda mucho que desde el mismo se avise de aquello que los titulares, a 180 pulsaciones por minuto, en ocasiones no ven.

La comunión entre los que juegan y los que no tiene que ser total. Lo importante es el equipo, por encima de las individualidades. Las victorias y derrotas son de todos y los egos no tienen cabida en los conjuntos. Lo fundamental es el objetivo grupal por encima de las metas personales. Cada jugador tiene que exigirse al máximo, pero siempre al servicio del equipo. Tanto los que saltan de inicio como los que irrumpen después.


Hacer que todos se sientan conectados, preparados y listos es tarea del técnico. Un jugador puede ser fundamental por poco que compita. Aunque solo sea porque le da refresco a un compañero o porque con su entrada hace aquella falta que no podría realizar otro ya apercibido. Todos suman, todos contribuyen y los grandes equipos consiguen que así sea. Desde los titulares hasta los que están en el banquillo todos se sienten fundamentales. Y eso es lo que ya tienen ganado esas escuadras antes del pitido inicial.

Feliz miércoles