Os dejo mi primer artículo de este 2015 que acabamos de estrenar que trata sobre la resolución de la Audiencia Nacional que se ha conocido recientemente que deja sin efecto la sanción impuesta a Ezequiel Mosquera por defecto de forma. Espero que os guste y...¡Feliz primer lunes de 2015!
Padrinos
Algunos nacen con estrella y otros estrellados, algunos tienen la suerte de venir con un pan debajo del brazo y otros se pasan la vida recogiendo las migajas hasta conseguir formar su propia hogaza. A algunos se les presupone la inocencia aunque las pruebas evidencien lo contrario, y a otros no se les permite ni siquiera demostrarlo. Algunos se llaman Alberto Contador y otros Ezequiel Mosquera.
Al de Pinto no le sobraron abogados defensores, que criminalizaban desde el solomillo hasta la vaca, pasando por el ganadero. Clembuterol, substancia que no puede generar el cuerpo, y que mágicamente aparecía en la orina del ciclista. El 21 de julio de 2010 da positivo en la segunda jornada de descanso del Tour de Francia, el 15 de febrero de 2011 se archiva el expediente y la UCI decide apelar al TAS (Tribunal de Arbitraje Deportivo). Entremedias gana la Vuelta a Murcia, la Volta a Cataluña, es quinto en el Tour, el entonces presidente Zapatero y Rajoy claman por su inocencia y el aparato mediático se vuelca con el ciclista.
El 21 de noviembre de ese año comienza la audiencia del caso por parte del TAS, Contador no pierde detalle de una vista donde declaran desde el carnicero de Irún, pasando por la Asociación de Ganaderos de Vacuno hasta un detective privado contratado por el ciclista para que siguiese el rastro del solomillo, aunque parezca ciencia ficción. 6 de febrero de 2012, la condena de dos años priva a Contador del Tour de 2010 y del Giro de 2011, ronda gala y Juegos Olímpicos de ese año.
La suerte de Mosquera fue otra, lejos de focos mediáticos, castigado al ostracismo informativo, huérfano de abogados defensores, carente de padrino. No le ayudó al exciclista del Xacobeo casi coincidir en el tiempo con el caso del de Pinto. A Ezequiel Mosquera se le detectó un resultado anómalo por 'hydroxyethil starch' en la Vuelta a España de 2010, en la que finalizó segundo, por detrás del transalpino Vincenzo Nibali. La apertura del expediente frustró su fichaje por el Vacansoleil e hizo olvidar su brillante victoria en la Bola del Mundo.
Sancionado a finales de 2011, no se computaron los meses que estuvo sin competir, y a Ezequiel se le dio la opción de volver a hacerlo en 2013, pero se cansó de esperar. Cuatro años después la Audiencia Nacional ha estimado el recurso de apelación interpuesto por el deportista, y ha anulado la resolución del Comité de Competición, dejando sin efecto la sanción.
Cuatro años. Ezequiel se consuela alegando que ha visto crecer a su hija. Esperemos que ella tenga el padrino que no tuvo su padre, y no me refiero a aquel que designan los progenitores que bautizan a sus hijos. Pienso en esa figura que sólo tienen algunos privilegiados, que los lleva de la mano y mueve los hilos mediáticos y de poder. Altavoz de su voz mientras la de otros es inaudible. Trileros muchas veces de mediocres, encantadores de serpientes, vendedores de humo y personas poderosas que saben que resortes tocar. Ezequiel no tuvo nada de eso, despreciado y apartado por el caso al que señalaban todos los focos, cumplió penitencia por un delito no cometido, mientras otros lloraban enfrente a Pedro J. Ramírez. La diferencia entre tener o no padrino. ¿Vosotros lo tenéis?
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